XXXV Congreso Nacional AEDAF – XXV Congreso Nacional AEDAF. Inauguración y Conferencia inaugural sobre el lenguaje en los escritos tributarios

Transcripción del XXXV Congreso Nacional AEDAF – XXV Congreso Nacional AEDAF. Inauguración y Conferencia inaugural sobre el lenguaje en los escritos tributarios

Transcripción:

– ¿Ya puedo? No, yo creo que ya.

– Yo creo que te pone el automático.

– Buenos días a todos.

– Para los que no tuviste ocasión, no tuviste esa ocasión ayer de asistir al cóptel de apertura en el precioso ayuntamiento de San Sebastián.

– A todos vosotros, la Comisión Directiva os damos la más calurosa bienvenida a esta bellísima ciudad.

– Quiero agradecer especialmente a la bici consejera de Hacienda del Gobierno Basco, que nos honra con su presencia y que ha tenido de hacer un esfuerzo realmente importante porque le han adelantado la aprobación de los presupuestos.

– Muchas gracias.

– Y sin más, cedo la palabra a mi queridísimo Javier Gavistavo.

– Buenos días.

– Muchas gracias, Tela.

– Bueno, no inmensa satisfacción.

– Perdón, no.

– Se me ha olvidado una cosa importante.

– También tengo que agradecer muy favorlosamente la aportación de nuestros principales esponsos.

– La libre, la ley y cejito.

– La aportación de todos ellos hace posible que nuestros congresos sean realmente tan espectaculares.

– Gracias.

– Buenos días.

– Muchas gracias, Tela.

– Bueno, es una total satisfacción estar aquí ver el semejante nivel de cantidad y calidad de asistencia, de compañeros y sin embargo amigos.

– En este primer congreso es 100% en pospandemia, porque la anterior había sido malicante y un arrastrábamos ciertos restos de la COVID.

– Totalmente obligado y placentero el trasladar todo el agradecimiento a todo el personal de la SED Central, que siempre hace que todo esto parezca que funciona como si fuera fácil, pero es muy difícil.

– Y en mi caso, pues muy especialmente a todos los miembros del Gabinete de Estudios, por toda su dedicación y en peño en que todo esto vaya bien.

– Y por supuesto el agradecimiento a la delegación del país básco, representado aquí por Gonzalo.

– Muchas gracias Gonzalo por toda vuestra aportación.

– Y bueno, poco más de decir que tenemos por delante dos días y medio con una pasión ante programa técnico, aunque comparto la idea de Gonzalo de que uno tiene tentación de subirse al autobús y al plan social.

– Y bueno, pues nada más.

– Espero que lo disfruteis.

– Muchas gracias a todos por vuestra presencia y Gonzalo cuando quieras.

– O simplemente, yo creo más en este turno mío, va a ser un turno más de agradecimientos.

– Yo creo que nadie puede asegurar el éxito de un congreso a través de que se celebre, pero yo os aseguro que va a ser un éxito.

– Y en estos agradecimientos, sobre todo, me da aprovechando que está jaibergame estavogada, pues agradecerle a él, sobre todo, y arturo, giminez contento, el fantástico programatéctrico que han preparado, con los ponentes y moderadores que han elegido.

– También quería agradecer a María José de lo yo, esa dedicación en búsqueda de localizaciones como ésta, por ejemplo, y la preparación de los programas de sociales y programas de acompañantes que realmente son estupendos.

– Y finalmente, por supuesto, a toda la se descentral por el apoyo que nos ha dado y por poner unos nombres, pondría el de María Lores y, sobre todo, esa pareja de Raquel, Gemma Raquel, que son impagables.

– Por lo tanto, yo lo único que os deseo es que tengamos todos un buen congreso que seguro que sí.

– Lo único del organización que nos afallamos es el del tiempo, no sé que le estaba encargado, pero se leído la mano y nos esperemos que que mallen a esto, esto mejor.

– Gracias.

– Gracias, Popo.

– ¿Eguaron? Lenin, que también va con razón etara a abertar a tu sara, te guste y encacó, doda, nere, agúrric, peroena.

– Quiero saludar a todos los ilas asistentes y dar la bienvenida a quienes lo hacen, de fuera de esta comunidad, deseando una feliz extancia.

– Quiero también, en su nombre, excusar la asistencia del consejero de economía y haciendo pedro-aspeazo.

– Esta semana se ha presentado el proyecto de presupuestos generales de la comunidad autónoma de Uscadi para el año 2024 y es una semana especialmente complicada para el consejero y finalmente no ha podido acudir y me ha enviado a mí.

– Me diante estas palabras, quiero dar nuestro reconocimiento a la labor desempeñada por esta asociación que, durante más de sus 50 años de asistencia, ha trabajado con la idea de compartir experiencias y a unar esfuerzos en una profesión que, sin duda, es fundamental para garantizar la relación del contribuyente con la Administración tributaria, relación que facilita un mejor cumplimiento de las obligaciones tributarias de las personas y empresas.

– Soy es por tanto pieza importante de la maquinaria con la que se obtienen esos tan escasos recursos que las Administraciones públicas invertimos principalmente en personas.

– Y lo digo con conocimiento de causa, pues como vosotros, durante un tiempo fui una de esas piezas y procuro no olvidar esa experiencia en mi actuación como vice consejera de Hacienda.

– He tenido la oportunidad de ver el programa de las ponencias que se van a desarrollar en los próximos días, también la agenda social, y me ha sorprendido gratamente el nivel de las mismas y, por supuesto, el nivel de los ponentes.

– Las deducciones por la innovación tecnológica, la inteligencia artificial, los incentivos fiscales en cultura son temas de actualidad que infiden en el día a día de vuestra actividad y de la nuestra.

– La propuesta vida de la Unión Europea, que sea, se vea desde la lejanía, pero sin embargo, es algo que de aprobarse impactará en nuestra y vuestra actividad diaria.

– Y, por supuesto, estando en Euskadi y con personas de otras comunidades, es prácticamente obligatoria una ponencia para dar a conocer la base de nuestro autogobierno económico.

– Una cierto sin duda, tanto la ponencia como el ponente.

– Como responsable del área del Concierto Económico, en el Gobierno Basco, nos parece fundamental que, por ejemplo, profesionales de la cienda de todo el Estado, conozcan nuestro sistema tributario y de financiación tan propio y singular.

– Porque cuanto más se conoce, más se comprende el sistema y mayor aceptación tiene sin ninguna duda.

– Dejaré que Pedro Luis Uriarte os dé las claves del Concierto Económico, pero se adelanto una.

– El Concierto Económico implica responsabilidad y mucha.

– No solo implica capacidad para decidir la normativa de nuestros propios impuestos, que también, por supuesto.

– El Concierto Económico implica la responsabilidad de ser una cienda integral.

– Y ser una cienda integral significa conocer el proyecto vida, el hot, el befit, el bebs, duck, faster y os.

– Y, otra propuesta europea que afecte también al Concierto Económico.

– Emplica responsabilidad para recaudar y gestionar los impuestos.

– Emplica ser la cara visible ante la ciudadanía y ante vosotros.

– Y en mi trabajo concretamente, la gran responsabilidad de mantener la propia asencia del Concierto Económico y hacer que, en un futuro tributario cada vez más global, no se coma un sistema tan local como el nuestro, que es todo un reto.

– Termino ya, agradeciendo de nuevo a la asociación, la imitación cursada al Gobierno Bascó.

– Espero que disfruten de las jornadas.

– Así espero hacerlo yo mañana, que me ha apuntado a venir.

– Y, si me lo permiten, les sugero para la tarde libre que tienen, ¿qué creo que es mañana? Que espero que haga mejor tiempo.

– Una actividad social con el tiempo más adecuado, que es un paseo por las tres playas desde el peine del viento hasta Zagués, con unos pinchos en la parte vieja.

– Es que arriescasco.

– La señora Gheirre, que ha tenido su pasado como el nuestro, me ha prometido que, si algún día, deja el Gobierno, desde luego se asociará a la edad.

– Y con esto, damos por muchísimas gracias.

– Gracias de nuevo y con esto, damos por terminado el acto neoliberal.

– Muchas gracias.

– Si no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no ¿Y en todos los que lleváis años en la edad o en de alguna manera habéis asistido a alguno de nuestros anteriores congresos? Sabéis que antes de zambullirnos en la orágena tributaria y de salir con la cabeza así, nos gusta siempre introducir el congreso con una conferencia sobre algo que no tenga que ver forzosamente, todo tiene que ver con lo tributario, sabéis que lo único cierto en este mundo es la muerte y los tributos, o sea, todo tiene algo que ver, pero no directamente.

– En el coceón eso hemos tenido, pues, eminentes médicos, eminentes económistas que nos han hablado del panorama macroeconómico, ni en esta ocasión nos ha ocurrido invitar al profesor Dario Villanueva en un giro que estamos seguros de que vais a disfrutar.

– El profesor Villanueva es luego Javier explicar brevemente su currículum porque hay que escuchar esa él y no a nosotros.

– Tiene un libro que os recomiendo viva mente a todos, que se llama Amordersel a lengua publicado, pero fue el año pasado.

– Aparte de que tiene una lectura fácilísima, da unas notas sobre el mundo en que nos movemos hoy día de lo más interesantes.

– Además, es un gran conferenciante, tiene un gran sentido del humor, es de Villalba cosa muy importante porque me parece que hay más de algunos entre el componente gallego de la asociación, que es también muy importante.

– Y ya me cayo y la palabra a Javier.

– Muchas gracias, Stella.

– Pues sí, efectivamente, el punto inicial del currículum de Dario Villanueva, muchas gracias, Dario, por aceptarnos la invitación, es origen de Villalba.

– Eso puede parecer un tema netótico, pero no lo es.

– Para los que no seas gallego, sus ubicos hubo un tiempo en que de ese pueblo, que tiene unos 7.000 habitantes, era el rector de los universidades de Santiago, Dario Villanueva, el capitán general de Galicia, el presidente de la Sienta y el arzobispo de Santiago.

– Es decir, ¿qué más se podía pedir que saliera de ese pueblo, que evidentemente algún tipo de reaxe peculiar debe tener? Bueno, Dario, que ha tenido la generosidad de acompañarnos hoy, que es la que su agenda en la Academia lo tenía un poco complicado, además de haber sido rector de la Universidad de Santiago, ha sido presidente de la Real Academia Española, que es la principal condición por la que hoy está aquí, evidentemente, cataderático y también miembro del jurado de los premios hoy princesas de Asturias, antes de principiar de Asturias.

– Brevemente, relatado muy brevemente, su extenso y esteso currículo.

– ¿Pues, Dario, cuando quieres, muchas gracias? Muchas gracias, Javier, has tenido la delicadeza de decir en donde he nacido, pero no en que año he nacido, cosa que yo te agradezco profundamente, pero en todo caso, todos ustedes al verme se darán cuenta de que yo ya he entrado en esa edad en la que se empieza a hacer caso del Consejo de los Párez.

– Y creo que después de escuchar esta doble presentación que se ha hecho de mí, debo de aplicar un Consejo Pattern un día, mi padre me dijo, Dario, tú nunca desmientas un elogio.

– Por ese motivo, no desmentiré las palabras tan generosas que acabo de escuchar y me pongo manos a la obra porque ustedes tienen por delante un programa intensísimo, lo he visto impreso y me ha dejado verdaderamente impresionado.

– En parte, me siento obligado a justificar el porquello, estoy aquí.

– La razón fundamental es la generosidad tanto de este, la Raventos, como de Javier Gómez Cabuada, que pensaron en que yo podía aportar algo en esta primera sesión matutina del Congreso.

– El aval para ello, pues creo que se ha resumido ya en lo que se acaba de decir.

– Yo soy un filólogo, es decir, que profesionalmente me he dedicado a la universidad por el camino del estudio de la lengua, de las lenguas, de las palabras.

– Y eso nos toca a todos.

– El lenguaje es el instrumento de nuestra realización como personas, pero también como ciudadanos y de la propia configuración de la sociedad.

– Por eso, por ejemplo, Aristóteles en su tratado de política le dedica una importancia enorme al lenguaje, porque él sabía efectivamente que, sin las palabras, no hay comunicación y sin comunicación, no se supera a barrera del individualismo más a cervo y nos integramos en una sociedad.

– Pero luego también la vida me ha llevado por otros derroteros complementarios, no completamente ajenos, por supuesto, al mío principal de filólogo, en especial a través de esa institución de la Real Academia Española, siento secretario de ella, antes de ser director, me tocó organizar el tercer centenario, porque la Real Academia Española se fundó en el año 1713.

– Es además una creación pura de sociedad civil, a diferencia de su modelo, que era la Academia Frances, que fue una iniciativa del Cardinal Rishuride, que era, por supuesto, el hombre fuerte del gobierno en aquel momento de la monarquía francesa.

– La Española no fue el resultado de la reunión de ocho ilustrados que estaban bastante preocupados por la influencia enorme que estaba teniendo sobre el español, la lengua predominante en aquel momento.

– Algo parecido a lo que nos puede estar ocurriendo ahora con el inglés, pero que en 1713 venía directamente del francés y pensaban que había que reaccionar a través de lo que la Academia empezó muy pronto a hacer y ha hecho, a lo largo de estos tres siglos y sigue en ello, que es la elaboración de los grandes códigos que articulan este idioma, que se llama español o castellano, de manera absolutamente sinónímica, que son por una parte un diccionario, por otra parte, por supuesto, la gramática y finalmente, aunque esto va al principio de todo, también la ortografía, porque en fin las lenguas no solo se hablan, sino que también se escriben y es muy importante que exista un código compartido a la hora de reflejarme mediante signos grafemáticos, los que son los sonidos del idioma que todos hablamos.

– Yo ha cieno mucho la tarea de aquellos fundadores porque ya les digo, inicialmente eran ocho, luego ampliaron sus sillas a doce y ahora somos en total 46, seguimos en la misma trayectoria que ellos, eso sigue procurando adaptarnos a los tiempos, el diccionario de la lengua española que ellos comenzaron a publicar en el año 1726, tiene en este momento 23 ediciones en papel, pero lo más importante es que ahora el diccionario sofrecial desde hace unos cuantos años en línea y tiene al año 100 millones de consultas procedentes de todo el mundo.

– Hay cerca de 4 millones de consultas diarias que la gente hace de las dudas lexicas que se le plantean a través de los instrumentos tecnológicos de que hoy disponemos se puede hacer a través de ordenadores, de computadoras, pero también a través de los teléfonos inteligentes.

– Y esto, en fin, a nosotros nos con gratula porque creo que nunca antes el diccionario de la lengua española ha tenido tanta influencia sobre la manera de hablar, porque ahora cualquier persona desde cualquier lugar del mundo puede consultar en tiempo real la duda que le pueda sugerir una conversación, una lectura, etcétera y ello ya les digo a ese rindo de 4 millones de consultas diarias que nosotros controlamos desde la sede de la academia en Madrid.

– Hablaba yo también de la gramática, por supuesto, la gramática es absolutamente fundamental, es una construcción teórica sobre los fundamentos del idioma, tanto en lo que es la composición de las palabras como en la combinación de ellas y la construcción de las frases y de las oraciones.

– El año pasado se recomi moró el quinto centenario de la muerte de un Andaluz universal, el Io Antonio de Nebrija, que fue el redactor de la primera gramática de una lengua vulgar, que era la manera en que se mencionaba en todas las lenguas al buen latín en la época en la que él vivió, finales del siglo XV y principios del siglo XVI.

– Efectivamente la primera gramática de una lengua vulgar fue la gramática sobre la lengua castellana de Nebrija y en su prólogo el enuncio una frase que se ha hecho muy famosa y que se ha tergiversado de manera muy prolífica.

– La frase es la lengua siempre fue compañera del imperio.

– Se prólogo está dirigido a la reina Isabel y en seguida sobre el sobre esa frase digo se construyó la idea de que el Antonio de Nebrija era el ideólogo del imperialismo lingüístico del castellano.

– Efectivamente esa gramática y ese prólogo son de 1492 y en 1492 sabemos lo que ocurrió, la llegada de Colón a América y lo que esto desencadenó.

– Pero Nebrija era un tipo muy listo y, sinceramente, así lo creo, no era profeta y el prólogo lo fecha en el mes de agosto de 1492 y Colón llega a América en octubre de 1492 por lo tanto cuando él decía la lengua siempre fue compañera del imperio y no estaba pensando para nada en un imperio que todavía no existía sino que estaba pensando en el imperio romano porque él era un latinista y efectivamente existía en gramáticas del latín pero no había gramáticas del inglés, del francés ni tampoco del español y él fue el primero en hacer una de ellas y además la palabra gobierno en aquel momento tenía un significado que ya me va acercando al centro de mi intervención de ahora.

– La lengua siempre fue compañera del imperio, ahí la palabra imperio significa gobernanza, es decir, el gobierno de la sociedad por eso él describe a la reina y le dice que usted majestaz es de quien depende no sólo la lengua sino también toda la cosa pública en la que están un sinmersos y efectivamente volviendo a través de Aristóteles, lengua de gobernanza, organización de la sociedad, etcétera pues van íntimamente unidas de modo que yo tengo que agradecer como filólogo y exdirector de la Academia Española que la Asociación Española de Asesores Fiscales haya concedido un espacio suficiente que espero no extender más allá de lo que se presenta al principio de su trigesimo, pinto, congreso porque ellos significa el reconocimiento implicito de ese hecho, que la lengua importa mucho también para un trabajo trascendental como es el que ustedes realizan.

– ¿Por qué puedo dirigirme a ustedes sin pedir demasiada complacencia por su parte? Ya lo he dicho, soy filólogo, he sido director de la Academia Española, como director de la Academia Española, he sido miembro del Consejo de Estado y en el Consejo de Estado mis compañeros, exministros, expresidentes de gobierno, expolyticos y luego personas de otras procedencias, pero en fin todas muy versadas en las cuestiones de la cosa pública, me agradecían mucho que yo asalta de una formación jurídica que no tengo con gran disgusto de mi padre que era magistrado y hubiese querido que yo siguiera por el mismo camino.

– Yo lo que aportaba era en ese trabajo que corresponde al Consejo de Estado, que es emitir informe no vinculante sobre las leyes que el gobierno manda al Parlamento.

– Yo siempre procuraba insistir en la cuestión lingüística y ya digo una de las mejores de las máximas satisfacciones que me traído de esa etapa era que todos mis compañeros lo reconocían y en consecuencia pues en fin avalaban el esfuerzo que yo hubiese podido hacer en ese sentido.

– La invitación que ustedes me hacen tiene otro significado que yo debo agradecer de manera clara y explícita y es la siguiente.

– Efectivamente la Real Academia Española hace más de tres siglos, empezó a trabajar y en fin su propósito fijado en un lema limpia fija y gasplendor era contribuir a la unidad, al buen uso, al progreso del idioma, pero yo les diré sinceramente que en esa tarea las Academias, porque además nosotros, por suerte, tenemos en total 24 Academias de la lengua española distribuidas en cuatro continentes, haya Academia en Guilera Cuatorial, en Filipinas y en América, muchas entre ellas la Academia Norteamericana de la lengua española y últimamente también en el Miepoca de Director creamos la Academia del Judeo español en Israel para que también ese fenómeno magnífico del mantenimiento del castellano medieval por parte de los judíos espulsos de España, los EFARDIES tuviese un lugar en ese conjunto que funciona por consenso, es una organización internacional, 24 países están en ella, pero que al tratar de algo que nos une a todos, funciona creo yo con un grado de consenso y de acuerdo extraordinario.

– Pues bien, lo que yo les decía es que siendo muy importante la labor de estas Academias y hubo un momento verdaderamente crítico al respecto, que es cuando, a principios del siglo XIX, empezaron los procesos absolutamente obligados, razonables y convenientes de las independencias de los países ispanamericanos.

– Entonces, había quien auguraba que al español le iba a ocurrir lo mismo que le había ocurrido en latín, que fue la fragmentación lingüística del vasto territorio de la romana, una fragmentación que tuvo unos efectos verdaderamente maravillosos, porque de ahí nació el cazalán, nació el castellano, el francés, el ruman, el portugués, el gariago, el italiano, una panopria de lenguas hermosísimas y utilísimas también.

– Se decía en el XIX que con el castellano iba a suceder exactamente lo mismo.

– Y sin embargo esto no sucedió y no sucedió gran parte por lo que desde la Academia Española que ya existía se promovió la creación de Academias americanas.

– A partir de un documento que a mí me parece extraordinario en donde aquellos predecesores nuestros decían, la historia no tiene vuelta atrás, ha cabido el odio y la guerra entre los españoles y los americanos que hablan español.

– Esa lengua incluso la hemos utilizado para maldecirnos, pero ha llegado el momento de aprovecharla ya que la compartimos para nuestra común inteligencia, aprovechamiento y recreo si utilizan estas des palabras.

– Y esto, cuajo, esto funcionó, porque mediadamente se creó la Academia de Colombia en 1871, luego de adecuador, la Bémexico se fueron creando todas las demás, las de Filipinas en el año 24 hasta llegar a la del judío español hace tres años.

– Y esas Academias han contribuido al mantenimiento de la unidad, que es un fenómeno verdaderamente extraordinario que será, por suerte, en nuestro caso.

– Si ustedes reflexionan un poco sobre ello, enseguida se darán cuenta de que a través de la televisión, cuando ocurre, por ejemplo, una catástrofe en Guatemala y se entrevista a una persona Guatemala teca que no tiene por que tener estudios especiales, lo que nos dice ante las cámaras, es algo que nosotros entendemos perfectamente bien, puede haber, por supuesto, una palabra que nos resulta extraña, pero el contexto nos ayuda a comprenderla, los acentos son diferentes, pero eso también ocurre en nuestra península y en nuestros archipiérderos, la manera de hablar de un gallego como yo y de un extremeño pues tiene sus elementos diferenciales, pero eso no es suficiente para romper esa unidad.

– Y en ese momento digo crítico del siglo XIX, la existencia de las Academias fue absolutamente determinante.

– Pero dicho esto, sinceramente les diré que en mi opinión las Academias siempre vamos por detrás de la realidad de la lengua, que es extraordinariamente dinámica, que encreá la lengua somos los hablantes y los hablantes somos los que inventamos palabras, los que rechazamos algunas, las dejamos de utilizar, les cambiamos el sentido también a las propias palabras y en ese proceso las Academias, lo que podemos hacer es estar muy atentos con nuestras pantallas puestas para captar lo que está ocurriendo y eso sí luego formalizar, porque eso es mucho más estable la gramática.

– Pero más importancia que la función de las Academias para mí, lo tienen los sectores profesionales en lo que se refiere a las palabras que les tocan más directamente para el ejercicio de su profesión.

– Es decir, cualquier sector, como por ejemplo de ustedes mismos, es el que está frente a la realidad esa creatividad lingüística continua que se está produciendo de manera que si en la propia agrupación profesional existe la conciencia de que se debe de cuidar, se debe de mimar el uso del idioma, las decisiones que se toman son absolutamente insustituibles.

– No hay ninguna Academia que puede hacer lo que ustedes y el resto de las organizaciones semejantes que pueden ocurrir realizan al respecto.

– Por supuesto también es fundamental la educación.

– El sistema educativo tiene muchos objetivos que cumplir, pero yo creo que uno de los básicos es precisamente que los ciudadanos conozcan su lengua o sus lenguas en el caso de países que tienen la suerte de disponer de comunidades vilingües, porque eso además es lo que le permite al ciudadano defenderse, antes, en fin, los poderes públicos, entenderse con el resto de sus compatriotas y en consecuencia configurarse como persona.

– Si yo he aducido al principio de mi intervención para poder hablarlos con hablarles a ustedes como una cierta autoridad.

– Hoy mi condición de filólogo, universitario y de Academia académico, ahora también se me ocurre decir que yo también puedo exigir y seguir y mire el argumento de que yo soy un contribuyente y soy además persona asesorada en un asunto tan delicado como es estar al día con las leyes fiscales de nuestro país.

– En relación a esto quiero ahora plantear brevemente dos asuntos.

– En primer lugar, algo que me dejó impresionado este año, hubo el Congreso Internacional de la lengua española que se realiza cada tres años y va a ser en la equipo de Rubro, por razones de la situación política de aquella República, hubo que improvisar en la ciudad de Cádiz.

– Ahí demostramos esa capacidad magnífica que los españoles tenemos para improvisar y el resultado fue muy bueno, pero allí en una ponencia de un académico, juirista mexicano, profesor Valdes surgió una información que me dejó verdaderamente asombrado y es que él comentó en España desde el año 1979 hasta el año 2021 se han decretado, se han aprobado, se han promulgado exactamente 410.6 mil disposiciones legales en forma de leyes, de forma de decretos, de forma de normas.

– Esto es verdaderamente abrumador y además a mí en seguida me produjo la enorme desazón, de saber que yo que tengo voluntad de ser un ciudadano o provo que actúa conforme a la ley, estoy seguro de que estoy transgrediendo en algunas de esas disposiciones, es absolutamente imposible, que si sobre mí y sobre todos ustedes hay cerca de medio millón de disposiciones legales, es imposible que no estemos sin quererlo transgrediendo alguna de ellas.

– Y eso también supongo que afecta la cuestión fiscal, estoy seguro de ello, aunque yo, por suerte, siempre he tenido un asesor que hasta el momento, he habido que convirtiera no teóricamente como creo que lo soy, sino en la práctica en un del incuente fiscal o en cualquier de los otros terrenos.

– Eso por una parte y la otra cuestión que les quería plantear es la de el problema del uso del lenguaje en los textos jurídicos, en los textos legales, etcétera.

– Esto es verdaderamente grave y ahí es donde yo en el Consejo de Estado me esforce aportar mi granito de arena.

– Lenguaje sirve para muchas cosas, los lingüistas han establecido lo que llaman las funciones del lenguaje.

– El lenguaje sirve para reflejar la realidad, esternan nosotros, el sirve para manifestarnos a nosotros mismos, sirve también para intentar influir sobre los demás, pero hay una función del lenguaje que es la que se aplica en el caso de las legales, es lo que los lingüistas llaman la función performativa que consiste en y más de menos en que el lenguaje, en una ley, crea e instituye una realidad.

– Esto es un poder verdaderamente extraordinario, yo incluso diría terrible, pero claro, si resulta que la formulación de esa norma que tiene consecuencias performativas es confusa, es contradictoria, es engorrosa, la cosa se pone verdaderamente muy complicada y en perjuicio de los propios ciudadanos.

– Fíjense siendo como soy un modesto filólogo, el hijo de magistrado, recuerdo que hace unos años tuve que intervenir como testigo, como un proceso, yo no era, por supuesto, el acusado era un mero testigo, y tampoco eso que ahora se llama muy investigado.

– Esto ya saben ustedes que antes se utilizaba la palabra imputado, pero por esa tendencia a la corrección política se pensó que era muy fuerte y que había que buscar un sustituto, esto se llama el ufemismo y se buscó el término investigado.

– Bueno, al término investigado le va a ocurrir lo mismo que ha imputado, como se refiere a algo desagradable dentro de unos años, pues las gente es políticamente correctas, dirán, no, no digamos que alguien es investigado porque eso es malo y buscarán otro término sustitutivo.

– Pues bien, yo me quedé muy pensativo por el hecho de que su señoría me hizo una pregunta que yo no sabía cómo contestar.

– La formulación de la pregunta era más o menos, digas no ser más cierto que.

– Y antes de comienzo yo me quedé perplejo, yo no sabía cómo tenía que contestar y era una fórmula propia del lenguaje jurídico que tiene ciertos atabismos de, en fin, una manera de usar la lengua que viene muy de atrás, en donde también, por ejemplo, se utilizan muchos términos latinos.

– A mí esto me parece bien porque yo amo mucho el latín, otra cosa diferente y luego previamente me he de referir a ello es la cuestión del inglés, yo con los anglicismos y que tengo una posición diferente en relación a los latinismos.

– Pero claro, yo me di cuenta entonces del enorme problema si un filólogo no sabía contestar a la pregunta de un juez que le podría ocurrir a una persona que no hubiese dedicado tanto tiempo a las gramáticas y a los diccionarios como le había dedicado yo.

– En este momento, por ejemplo, se ha firmado un convenio que espero que se ia eficaz porque ha habido precedentes y metemos que no han surtido toda la fuerza de realización positiva que querías esperar un convenio entre el defensor del pueblo y la carrera de mi espanola para lo que se llama el lenguaje claro, para que, en fin, los legisladores tengan muy presente esto que las leyes tienen que ser justas, tienen que ser coerentes, tienen que ser equilibradas, pero tienen que estar escritas también en un idioma claro, porque el que las debe de cumplir debe de ser capaz de entender perfectamente lo que la ley exige y demanda de ella.

– A mí me ha sido útil, sobre todo en la época míada del rector, la aplicación de un procedimiento que encontré que era muy de uso en el estudio y la programación de las corporaciones, de las empresas, de las instituciones, de las fundaciones.

– Es el análisis que, por el acrónimo en Castellano, se conoce como análisis dafo, el análisis de las debilidades, de las amenazas, de las fortalezas y de las oportunidades.

– En fin, yo ahora, en el tiempo que me queda de intervención, me voy a dedicar, si ustedes me lo permiten, no porque sea de natural pesimista y apocalípticos, sino simplemente porque creo que el tiempo lo debo de aprovechar, me voy a dedicar más bien a las amenazas que existen en el asunto vital de la lengua, del uso de la lengua.

– En el conjunto de las sociedades y también en sectores profesionales como ustedes representan.

– El primero, sin duda, es el lenguaje claro.

– Javier me ha proporcionado alguna información que ya me había adelantado Estela, sabiendo que yo no soy, por supuesto, un experto en el terreno fiscal para que tuviera algunas pistas al respecto y me han proporcionado algunos ejemplos.

– De la ley general tributaria de artículos que son de redacción, yo diría casi espeluznante.

– Por ejemplo, no lo puedo leer todo porque probablemente nos apuriríamos o nos dormiríamos todos.

– La diferencia es que se refieren como un ciudadano, como un puede entender el artículo 27.5 de la ley general tributaria cuando dice, el importe de los recargos, a que se refiere el apartado dos anteriores, se reducirá en el 25% siempre que se realice el ingreso total del importe restante, del recargo, del plazo del apartado dos del artículo 62, de esta ley abierto con la notificación de la liquidación de dicho recargo y siempre que se realice el ingreso total del importe de la devgo resultante, de la autoliquidación temporánea o de la liquidación practicada por la administración derivada, de la declaración temporánea, al tiempo de su presentación o en el plazo del apartado dos del artículo 62 de esta ley, respectivamente o siempre que se realice el ingreso en el plazo, plazos fijados, en el acuerdo total, total, total, total, total.

– Claro esto, esto es realmente terrible, ¿no? Es mucho más fácil entender la crítica de la razón pura de Inmanuel Kant, que no es moco de pavo tampoco, pero simplemente valga esta pildora como un ejemplo y esto desafortunadamente ocurre no solo con la general tributaria sino con el conjunto de muchas otras leyes, de las demasiadas leyes, esas medio millón de leyes que tenemos encima de nosotros, tenemos una tendencia en nuestro país que cuando ocurre un pequeño problema, y mediatamente se dice que hay que crear una ley para ellas, si resulta que en las carreteras se están incrementando los pinchazos de los numáticos y dellatamente hay que generar una ley sobre el asunto, sobre una suposición que es muy curiosa contra la que yo estoy, y es la de creer que las palabras crean las realidades, cuando es exactamente al revés, son las realidades las que crean las palabras.

– La palabra es un epicenómeno de la realidad y sin embargo existe la idea contraria, de dónde viene, por ejemplo, esa expresión de la corrección política que consiste en suprimir palabras que reflejan cosas desagradables, en el supuesto de que si se suprimeta al palabra la realidad también se va a espumar, y mi época de director de la academia yo recibía todos los días, pero si se ha sido muy difícil, a veces muy adirados, exigíéndome perentoriamente que retirara del diccionario determinadas palabras, con argumentos muy diversos, porque se pensaba que efectivamente así se reglaba el mundo, si es usted es que Félif, que fácil sería hacerlo, si simplemente suprimiento palabras arreglaramos una realidad.

– Claro, había casos muy curiosos, un señor me escribió una carta incendiaria, me lanzando además con denunciarme ante las autoridades, porque en el diccionario existía y existe una palabra que no vamos a retirar, por supuesto, que coincidía con su apellido.

– Y la palabra era chapero, y la definición en el diccionario de la palabra chapero, que es una palabra que existe y que se usa, es la de como exesual masculino que se prostituye, entonces él decía que la academia lo insultaba personalmente al poner esa palabra y esa definición cuando él, a mi hacía nunca se había prostituido, y era un hombre absolutamente íntegro en su masculinidad.

– Bueno, esto se ha extendido, los Jesuitas se quejan de que la palabra jesuítico tenga como explicación en el diccionario hipócrita.

– En fin, personas preocupadas como todos por la terrible enfermedad del cáncer exigían que se retirara la cuarta acepción de la palabra cáncer, que es algo así como cualquier distorsión perjudicial para el funcionamiento de un organismo, etcétera.

– Pues claro, de las definiciones médicas, que es, en fin, la enfermedad sensí, los tumores concretos, agucían que un diccionario pareciera esa acepción era no me perjudicial para la recuperación de los enfermos de cáncer.

– Yo no veo la relación entre una cosa y otras, pero en relación a las demasiadas leyes, al número de leyes, ha ocurrido algo verdaderamente asombroso seguro que ustedes tienen una tija de ellos.

– El boletín oficial del Estado hace unos meses, en el mes de Avil, concretamente, derogó de golpe y por razo la Constitución de 1978, la Ley de Enjuicimiento Civil, el Pódico Penal, el Pódico Civil, el texto refundido del Estatuto de los trabajadores, la Ley General de la Seguridad Social, la Ley Reguladora de la Jurisdicción Social, el texto refundido de la Ley Concursal y la Ley de Regimen Jurídico del Sector Público, resulta que una base de datos jurídica y ver ley detectó esto, e inmediatamente, claro, se pusó en contacto con las autoridades responsables de la Gazeta de Madrid, que es el nombre histórico del boletín oficial del Estado, y se trataba, por supuesto, de un error y inmediatamente se usanó, pero bueno, durante unos minutos nos vimos libres de parte de esa presión legal, verdaderamente, agobiante, estomagante, que pesa sobre nosotros.

– Claro, está que en España tenemos para casi todos soluciones que no están escritas, pero que son muy operativas.

– Y yo siempre, en relación a este fenómeno de la progrescelación de las leyes y, en fin, posibilidades imposibles como es denegar todo, deslogar todo esto de un plumazo, con algo que me ocurrió hace muchos años visitando lo que ahora es la sede del Instituto Cervantes en Utrecht, y entonces era una oficina del Ministerio de Trabajo para atender a nuestros compatriotas emigrantes en los países bajos.

– Me enseñaron los… estoy hablando de los años 80, los responsables, me enseñaron las instalaciones muy bien situadas, muy cerca de la Catedral de Utrecht, con pequeños salón de actos, con cafetería, y también había una parte de servicio de aulas, porque se impartían clases de Nerlandés, y en una de ellas había un letrero que me dejó muy impresionado.

– La aula tenía unas sillas de esas de pala para que los alumnos pudieran escribir en ellas, y el letrero que había fuera decía, queda terminantemente prohibido retirar las sillas de la sala, junto, en caso de hacerlo devuelvanse enseguida.

– Figue esta es la salvedad con que nosotros en España resolvemos esta imposición radical y terrible de las leyes que caen sobre nosotros.

– Bien, amenazas de la situación lingüística.

– He mencionado ya las demasiadas leyes, y sobre todo que estén mal escritas.

– La filología ciencia, la que yo me he dedicado, nació, sobre todo, por una exigencia perentoria emanada de los textos teológicos y religiosos.

– Es decir, los textos sagrados tienen que ser mantenidos en su pureza, y, sobre todo, tienen que ser bien interpretados.

– ¿Por qué? Porque si no ocurre esto, puede surgir la elejía.

– Si el texto sagrado se manipula, se deturpa o se interpreta mal, en vez de reflejar la palabra de la divinidad, pues estaremos deturpándola.

– Esto ocurre exactamente también con textos que no sean propiamente teológicos, y la filología tiene como función precisamente.

– Eso da y viene, quizás me interés, contribuir en el Consejo de Estado a lo que antes les decía.

– La búsqueda es el lenguaje claro, porque el propio nebrija decía si ha de escribir cómo se habla y se ha de hablar como se escribe.

– Hay que procurar que haya una fluencia de claridad entre una cosa y otra.

– Antes de pasada mencioné los anglicismos, claro, este problema que fue el que los fundadores de la Academia hace 300 y pico años vivían, pero por el francés ahora ocurre por el inglés.

– Porque el inglés ganó la segunda guerra mundial, ese es el hecho.

– Antes de 1945, la lengua de la ciencia era la alemán, la lengua de la diplomacia era el francés, pero el resultado de aquella contienda significó un predominio, un empoderamiento brutal del inglés, el que hoy en día existe.

– Yo, por supuesto, no tengo nada que decir al respecto, siempre ha habido en fin unas lenguas que han servido para la intercomunicación y ahora esto está ocurriendo con el inglés, lo cual no impide que, por ejemplo, el español o castellano sea la segunda lengua por el número de hablantes nativos en el mundo.

– Después del chino mandarin, hablantes que tienen la lengua por, o sea, origen materno, familiar, 600 millones de personas en el mundo.

– Pero el inglés ocupa esa condición de lengua franca y ahí está.

– A mí lo que me molesta mucho es que precisamente, por ejemplo, en el ámbito de los hispano-ablantes, existe un auténtico papanatismo que refleja un profundo complejo de inferioridad en lo que se refiere a la lengua inglesa.

– Por ejemplo, en los programas de televisión de las televisiones producidas en nuestro país, tanto las oficiales, las públicas como las privadas, la mayoría de los títulos de los programas están en inglés, hace no mucho, había una serie que se llamaba Famili.

– Es decir, gustaban una A para decirlo en castellano, Familia, no lo decían Famili, la familia era española, hablaba en español y todo lo que él disocurría tenía que ver con nosotros, pero sin embargo, era Famili, un programa de encuentros amorosos, se titula First Dates.

– Y así sucesivamente.

– Y esto ocurre también en el ámbito, por ejemplo, profesional.

– Ahora, la mañador de una boda es un Wedding Planner.

– O está claro está el Chief Executive Officer, el CEO, que es un consejero delegado y se le llama así.

– Claro, la experiencia, quizás, más llamativa al respecto que yo he vivido, es viajando como director de la cabemia en el año Cervantino a la mancha, la mancha profunda de los molinos de viento y de Don Quijote.

– Me encontré que en una de esas rectas en ese paisaje impresionante que la mancha proporciona había un local, a mano derecha, de no muy buen tono, que se anunciaba con unas enormes letras de neon, y lo que decía anunciándose dicho programa era Show Girls Low Cost.

– Claro, a mí me entraron ganas de pararme, aquí se me llano, entraron ganas de pararme y hablar con los propietarios, ofreciéndoles desinteresadamente, un título que yo creo que podía ser muy hermoso, que reflejaría lo mismo, y además con una ventaja, eso le decir que el inglés sobre el castellano tiene la mejora de que es una lengua más directa, más concisa, y que lo que nosotros tenemos que decir con dos o tres palabras, ellos lo dicen solo con una, que además sirve de sustantivo, de objetivo, de verbo y de todo, claro, yo les iba a proponerlo siguiente, pero por favor, en vez de Show Girls Low Cost, que son cuatro palabras, lo suyo es un burdel barato, y además lo bien que suena, con estas, con estas ves, que son unas consonantes bilariales muy sonoras y con la resonancia de la R.

– Bueno, aquí sí que tenemos que hacer un esfuerzo, y es donde los sectores profesionales son los primeros que pueden decir, bien, llega tal concepto, llega tal noción que aparece en inglés, pero nosotros vamos a buscar una equivalencia en castellano.

– Por supuesto, hay casos en que esa equivalencia no aparece, y no pasa nada, porque los perislamos lingusticos siempre han existido.

– En el 19, el gran avance fue el tren, y nosotros hablamos de tren, que por cierto es una palabra francesa, aunque nos vino por los ingleses, pero, en fin, hablamos de vagón, y nadie siente que sea una palabra extemporánea, viene de inglés, no hay problema, lo mismo ocurre con el fútbol o fútbol, es cierto que se intentó que se dijera a Valompier, y de vez en cuando los perronistas deportivos utilizan el sinónimo de Valompier por fútbol o fútbol.

– Bueno, no pasa nada, en las lenguas siempre ha habido préstamos, pero otra cosa es ese pacanatismo al que antes me refería.

– Y ya para terminar, porque ese es el momento, ¿verdad? Lo que yo quisiera comentar es otro amenaza que se cierne sobre el uso de la lengua, en todos los niveles, incluyendo también el nivel legislativo y de la gestión, incluso de la cuestión tributaria.

– Y a ello ha hecho una breve alusión hace un momento, que es lo que se conoce como la corrección política, que es una forma de censura, en donde, a partir de sentimientos que son muy nobles, de protección de las minorías, de reivindicación de la superación, de injusticias y de desigualdades, se le culpa la lengua de lo que ella realmente no es culpable.

– Las cosas malas que existen, ya lo he dicho y lo reitero ahora, no existen como malas cosas, porque haya palabras que las tecinas, las palabras vienen después.

– Y por otra parte, en relación, por ejemplo, a que el señor Chapero que me escribió, las palabras que están en el diccionario no las han inventado los académicos, y sobre todo, no son de uso obligatorio, es decir, en el diccionario actual nuestro, hay 93.000 palabras y 200.000 acepciones, y no es de uso obligatorio, emplearlas.

– A partir de ahí cada blante tiene la absoluta libertad de usar las que le parezcan conveniente.

– Lo que sigo ocurre es que ya lo decía Aristóteles, las palabras sirven para lo bueno y para lo justo, pero sirven también para lo injusto y para lo inconveniente.

– Las palabras sirven para ser civilizado, ser onrado y ser educado, pero también para ser un canal, o para ser un enervúmeno.

– Y según las palabras que usemos, nos definiremos en una dirección o en otra dirección.

– Y aquí está este problema de la corrección política, que muchas veces va por el camino de los sufremismos, lo que antes les comentaba.

– Un ensayista australiano Robert Hughes hace muchos años, ya llamó atención sobre esto, y puntaba un caso estupendo, decía que en una revista médica de Massachusetts había encontrado una indicación de los editores a quienes colaboraban en ella, que eran forenses médicos y ganas, prohibiéndoles el uso de la palabra cadaver, y exigiendo que se utilizará la expresión persona no viva.

– Y él añadi a Hughes, en consecuencia, si un forense hace una autopsia a un cadaver de una persona gruesa, tendrá que definirlo como persona no viva de tamaño no estándar.

– Y hacen estos sufremismos, están ahí, producen a veces situaciones muy ridículas y situaciones legales complicadas.

– Ya sabemos ustedes que uno de los asuntos más sensibles al respecto es la cuestión del llamado el sexismo del lenguaje, el llamado lenguaje inclusivo, que tiene una expresión que consiste en el desdoblamiento, en contra de lo que muchas gramáticas es inclusivo, que es el masculino, el desdoblamiento, el masculino y el femenino.

– Claro, sobre la idea de que ese masculino, inclusive, es un instrumento de letero patriarcado para oprimir a las mujeres.

– Claro, si se conoce un poco la lingüística, nos encontramos con casos como, por ejemplo, una lengua que se habla en el Caribe Venezolano, que se llama Alguajiro, en donde el género inclusivo es el femenino y la sociedad cuagida, es una sociedad donde las mujeres no tienen absolutamente el inmundo derecho, en comparación a los derechos absolutamente imprescindibles y es la gran revolución de nuestro siglo, las mujeres en las sociedades más desarrolladas.

– Bueno, ese doble de manera terminora, de manera cortés, de si siempre nosotros lo hemos utilizado, los confereciantes empiezan, señoras y señores y muchos casos hay que utilizar tal desdoblamiento por razones obvias.

– Otra cosa es convertirlo en una norma.

– La ley, la Constitución Bolivariana Última, tiene un artículo que ha dado mucho de comentar que es un artículo de varias páginas, en donde se describen todos los cargos representativos del gobierno de la República, en masculino y en femenino, con un doble de absolutamente estomagante.

– Y aquí hay siempre también posibilidades de picar escales, cuento, en Lucena una compañía, esto hace dos años, una compañía productora de aceite y, lo siguiente, tenía que pagar los atrasos por el incremento del salario acordado en el convenio colectivo a sus trabajadores.

– Y en el convenio colectivo generalmente se utilizaba el doble, se decía siempre los trabajadores y las trabajadoras, pero en este punto concreto del pago de los atrasos se decía sólo los trabajadores.

– Y la compañía dijo que, claro, a las mujeres entonces no se lo iba a pagar, porque el convenio decía que era sólo a los trabajadores masculinos.

– Encontra además de una norma de orden superior a un convenio que es el estatuto de los trabajadores, es el nombre que la ley tiene en este momento.

– En fin, son problemas que deridan de algo que yo como filólogo procuro siempre defender y es que yo me siento persona de mentalidad profundamente ecológica, pero aplico también el ecologismo a la lengua.

– La lengua es un sistema, es un sistema que hay que cuidar y que no se puede alterar, es un sistema porque si modificamos un elemento, eso repercute en el conjunto de todo lo demás.

– Hace muchos años una ministra, una reunión dijo, miembras y miembros.

– Eso, inmediatamente para regularizar el paradigma lingüístico, exigiría que a los brazos les llamásemos miembros, pero a las piernas le llamásemos miembras.

– Porque, claro está, el esquema tendría que ser reservado.

– Y también yo recuerdo que hace y terminó ahora tiempo el presidente del gobierno con toda la buena voluntad del mundo, hizo una declaración muy fin solente diciendo que tenemos que evitar por todos los medios el enfrentamiento entre catalanes y catalanas.

– En claro, lo que quería decir, que había que evitar que la sociedad catalana se fragmentara por cualquier conflicto y ya sabemos probablemente lo que se refería, pero al decir, el enfrentamiento entre catalanes y catalanas parecía que estaba ludiendo a la lucha de los sexos o de los géneros, al enfrentamiento entre hombres y mujeres.

– Y sin embargo tengo que decir en su reconocimiento que la declaración pública pizo de Salamón Clóa, en el mes de marjo del año 20 para anunciar el confinamiento por COVID.

– Todo el tiempo dijo peridos compatriotas, tenemos que afrontar juntos en un problema que nos amenaza, contamos con todos los servidores del sistema nacional de salud en ello y pido especialmente el esfuerzo de los mayores y de los jóvenes, porque sólo entre todos saleremos adelante, es decir, era un momento muy delicado y después de esa declaración yo estoy seguro de que ninguna mujer pensó que el presidente estaba hablando exclusivamente para los españoles barones y lo que efectivamente como la gramática establece con ese masculino inclusivo, y esa referencia era una cobertura de garantía para toda la ciudadanía en su conjunto.

– Muchas gracias.

– Muchas gracias.

– Muchas gracias, Dario, por tu conocimiento y por tu sentido del humor también.

– Hemos pedido cinco minutos más, Javier y yo, aprovechando que detenemos aquí, hacerle algunas preguntas sobre el lenguaje que sin querer nosotros también a veces utilizamos.

– Dejó aparte ya el término sujeto pasivo, que como decía José Árías Velasco para aquellos que lo conocíais, no había nadie más activo que el contribuyente.

– Ahora se ha sustituido el contribuyente por la palabra obligado tributario y además en muchos casos incluso el tributario cae y se queda solamente como el obligado, no lo cual uno no sabe a qué obliga.

– Pero hay algunos términos que nosotros estamos utilizando mal por el uso, por la influencia anglosajona, por lo que sea, que un cuatro o cinco palabras que nos gustaría simplemente, por ejemplo, una ley aplica o se aplica.

– Es un anglicismo crudo y burdo.

– Tu applaí inglés tiene ese régimen que he traducido al español, pues es una aberración total.

– O sea que hay que evitarlo y además hay un montón de formas de decir lo mismo con la misma eficacia.

– ¿Afrontamos…

– no, enfrentamos una situación delicada? En eso también la lengua es muy flexible y se entiende perfectamente lo que se quiere decir.

– Nos confrontamos con, pero nos enfrentamos a, yo creo que sí que son dos maneras perfectamente legítimas, a decir lo mismo.

– A veces en estos dobletes hay una que es más elegante que otra, más genuina que otra, pero tampoco hay que ser excesivamente riguroso.

– Cuando la Academia se creó mi 1613, el Lema se discusió mucho el Lema y al final quedó esto de limpiar, fijar y a desplendor que parece un eslogan de un producto de las papagillas, ¿no? Pero el Lema competía con él y creo que los fundadores fueron sabios al rechazarlo, era ni más ni menos a prueba y repueba.

– ¿Y por qué probablemente no quisieron ese Lema? Porque faltaban 150 años para que el duque de Oumada creara la Guardia Civil.

– Y si la Real Academia Española tuviera como Lema a prueba y repueba tenía que tener un brazo armado para que obligara a que lo ha probado, fuera aplicado y lo desaprobado, fuera punido.

– Muchas gracias, Sarío.

– Yo que tengo más de una década sobre mi cabeza de educación, Jesús, espero que no Jesús ítica.

– Te quería plantear la Administración Tributaria en general, la empezada a dar ciertas muestras de sensibilidad sobre la dificultad del lenguaje, no ya el legislativo, porque son de su incumbencia directa, sino del lenguaje que ella expone en sus comunicaciones con la población, con la ciudadanía.

– Y probablemente estos días, precisamente hay algún evento que trata sobre esto mismo, le abordar el lenguaje tributario en su relación con la ciudadanía.

– Cuando hemos comentado estos temas con ellos siempre nos trasladan algo que yo veo lógico, pero que no sé si tiene fácil solución.

– Tu antes apuntabas en cuanto a que el lenguaje tiene que ser nítido, el lenguaje técnico es muy explícito, muy específico.

– Trasladando el tema lenguaje médico, que podría ser un tema que nos sirva como comparativo, tú crees que cuando un médico o un abogado trasladan al paciente, en nuestro caso cliente, las cosas, es posible trasladarlos sin perder nítidez y exactitud en que es exactamente lo que se está haciendo.

– Por eso se les va a trasladando por qué es el mensaje de la Administración tributaria que se nos dice, cuidado, pero como empezamos a relacionarnos con los contribuentes con el lenguaje cotidiano, el lenguaje dialogado normal, podemos perder esa pulquitud.

– Bueno, no cabe en ninguna duda que profesionales como ustedes tienen una función importante en lo que es traducir de manera más comprensible, lo que por su complejidad técnica en origen puede ser difícil para alguien que no sea precisamente un profesional.

– Eso me parece muy bien, es normal y efectivamente no vamos a escribir las leyes en lenguaje celli, eso no lo pretenden a alguien, pero las leyes las tenemos a escribir en una lengua clara, precisa y exacta.

– Y el parra foqueante es leí, que vosotros me mandaste, es una muestra exactamente de lo que no se puede hacer, no tenía puntos y aparte, no tenía oraciones cerradas en sí misma, cada una de las cuales fuera una píldora de significación que fuera increscendo.

– Eso está en la redacción de la ley, que es lo que yo en el Consejo de Estado siempre denunciaba, los propios redactores de la ley no tenían el sentimiento de la importancia enorme, que tenía para la eficacia de lo que iba a hacer, no sólo el concepto, sino la manera en que ese concepto era formalizada.

– Por lo tanto, para responder a tu pregunta, creo efectivamente, y el hecho de que ustedes hayan querido que yo haya hecho perder un poco de tiempo con mi intervención, pues indica que son conscientes de que esa función también les corresponde, sin que, por supuesto, esto significa menos cavo del rigor y de la complejidad que las leyes y especialmente las leyes o las normas tributarias puedan tener.

– Con esto, ya damos por finalizada la intervención del profesor Villa Nueva, aquí en realmente le agradecemos muchísimo que nos haya dedicado un rato de tiempo y nos haya ilustrado sobre muchas más cosas aparte del lenguaje tributario.